Vivir tranquilas, respetadas, integradas y reconocidas. Vivir sin golpes, sin insultos y sin vejaciones. No debería ser una aspiración ni un deseo, simplemente debería ser una realidad.
Un año más, este 25 de noviembre de 2021, desde el Partido Popular de Almonte, nos hacemos eco dela grave situación que padecen algunas mujeres de manos de agresores que son o han sido susparejas. Lo hacemos de la mano de una sociedad no solo concienciada sino cada vez más comprometida con su erradicación, y con la suma de tantos hombres que incorporan su lucha a nuestra lucha, su defensa a la nuestra, en una condena común de hombres y mujeres frente a los agresores.
A lo largo de este año 2021, actualizadas a 8 de noviembre, la cifra de mujeres asesinadas en España asciende a 37, estando tres casos más en proceso de investigación, quedando 24 menores huérfanos. De estas 37 mujeres asesinadas, casi el 80% no habían interpuesto ningún tipo de denuncia previa y sólo la mitad de las que denunciaron su situación solicitó alguna medida de protección. De estas 37 mujeres asesinadas, 7 eran andaluzas.
Este año, y frente a la frialdad estadística, queremos centrar este manifiesto en el futuro de cada una de las voces, de las caras, de las vidas que hay detrás de la cifra, en la necesidad de que las administraciones públicas, en sus diferentes competencias, actúen en la prevención, en la asistencia inmediata y en la atención posterior a las mujeres y sus hijos e hijas.
Y en este sentido, desde el Partido Popular en el gobierno de la Junta de Andalucía, se han centrado los esfuerzos en la prevención y en la asistencia, en evitar que se den las terribles situaciones de violencia y en, si éstas ocurren, paliar las consecuencias, apoyar la recuperación e intentar favorecer esa nueva vida que todos merecemos.
Desde el Instituto Andaluz de la Mujer, IAM, se planifican, coordinan y desarrollan actuaciones y planes para la erradicación de la violencia de género impulsando la atención integral a las víctimas. Para hacer efectivos todos los objetivos y las estrategias necesarias, para que no solo sean palabras e intenciones, en el proyecto de presupuesto presentado para el próximo año 2022, se ha incrementado en más de siete millones y medio la cantidad, destinando casi 26 millones y medio al programa específico contra la violencia de género. Destaca el incremento en las ayudas directas a las víctimas, que para el próximo año se presupuesta en 1.270.000, medio millón más que el presente año.
Y en este Presupuesto se concentran acciones fundamentales para erradicar la violencia que tantas mujeres sufren por el solo hecho de ser mujer, actuaciones tendentes a:
- Garantizar y reforzar la atención integral a las mujeres y sus hijos
- Garantizar el derecho al asesoramiento y a la atención, diferenciando si el tipo de violencia sufridaes o no de carácter sexual y si la mujer es o no menor de edad
- Favorecer la inserción social y laboral, en especial de aquellas mujeres especialmente vulnerables que sufren violencia
- Fomentar la formación y la sensibilización, con campañas informativas, con formación a profesionales, edición de guías y materiales y el mantenimiento de la convocatoria de subvenciones a asociaciones de mujeres que tienen la necesaria cercanía con las víctimas
- Promover la independencia económica de las víctimas, facilitando su autonomía y recuperación integral a través de ayudas económicas directas que hagan posible el alejamiento de su maltratador
En definitiva, PREVENCIÓN, APOYO y FUTURO.
Desde el Partido Popular de Almonte somos conscientes de la grave realidad de la violencia hacia las mujeres y de la existencia de hombres maltratadores, no son conceptos imaginarios y desde las administraciones debe hacerse frente a su erradicación, sin paliativos, de forma integral y continuada, acompañando a las víctimas y a sus familias en el difícil camino hasta su recuperación.
Pero necesitamos la colaboración de la sociedad en general y de las mujeres víctimas en particular, su denuncia, su voz y su confianza. El reconocimiento del maltrato y la voluntad para salir de él es un primer paso en el que se apoyan los recursos que van a hacer posible una vida mejor.
Este nuevo 25 de noviembre, volvemos a decir que las mujeres víctimas de violencia de género no están solas, que cada día más la sociedad es consciente de que un maltrato es un fracaso y solo aunando esfuerzos se consiguen los mayores resultados.
Y la palabra “esperanza” nunca dejará de ser la más presente, frente a todo y sobre todo, sabiendo que vivir tranquilas es un objetivo justo y legítimo.